domingo, 8 de noviembre de 2015

El viaje en coche y su germanización

   Allá por el mes de Mayo nos trajimos el coche desde Sevilla. Hicimos toda la Ruta de la Plata hasta Salamanca y ya desde allí tiramos por Valladolid y Burgos hasta San Sebastián, donde pasamos la noche. Al día siguiente atravesamos Francia en diagonal y entramos en Alemania por Freiburg. Desde ahí todo recto, literalmente, hasta Heidelberg. 
Dekra
DEKRA, uno de los sitios donde pasar la ITV alemana
   Una vez en Heidelberg, y como al coche le tocaba pasar la ITV en Junio, no nos quedó más remedio que matricularlo aquí. El primer paso fue hacerle un seguro provisional alemán porque sin esto no te permiten registrarlo en Alemania. Te dan un número de seguro provisional que tienes que presentar junto con la documentación española del coche. Nosotros solicitamos el número de seguro provisional un día y nos lo dieron al día siguiente. El proceso de matriculación fue superrápido y relativamente fácil. En una mañana llegamos a la oficina de tráfico (Zulassungsstelle) con nuestras matrículas españolas y nos fuimos con nuestras matrículas alemanas. Primero hay que llegar allí con toda la documentación española del coche y decir que quieres registrar tu coche allí. Se quedan toda la documentación española, así que es conveniente hacer copia de todo. En la Zulassungstelle no tuvimos suerte porque la chica que nos atendió no hablaba inglés, pero se portó muy bien hablando muy despacio para que la pudiesemos entender. Te toman los datos del vehículo, firmas unos pocos de papeles para autorizar el cobro del impuesto de circulación y te mandan a que le pases la ITV. Hay distintas oficinas que te hacen la ITV, y el precio no es igual en todas. Nosotros fuimos a DEKRA, que nos dijo la chica que nos atendía que era la que mejor nos podía salir de precio. Fuimos sin cita ni nada, directamente. Llegas, te pones en la cola de coches y lo revisan. Al menos en donde nosotros hicimos la revisión tú le das la llave al mecánico y esperas en una salita mientras ellos hacen todo. Una vez te revisan el coche (a nosotros nos tardaron unos 20 minutos) y te firman que todo está correcto y  pagas los casi 100 euros que vale, te dan más papeles y vuelves a la Zulassungsstelle a que te den el número de matrícula. Por unos 15 € más puedes elegir tus números y letra de la matricula. Pasando. Te dan un papelito con el número asignado de matrícula y vas a la tiendecita que hay al lado de la Zulassungsstelle a troquelar las placas. Las pagas, vuelves a entrar a la oficina, y te colocan en las matrículas los sellos de la ciudad y el de la fecha en la que te toca la siguiente ITV, junto con la pegatina medioambiental. Sales con tus matriculas nuevas y se las pones al coche. Pero aquí hay un problema, la mayoría de las matriculas van atornilladas al coche, no? Pues en Alemania, no. Aquí van encajadas en un soporte de plástico, nada de tornillos. Por suerte a la salida de la Zulassungsstelle hay un taller que por unos módicos 25 € nos desatornilló las matrículas españolas y nos colocó las alemanas. El mecánico nos contó que todos los  coches, españoles, italianos, rumanos y búlgaros que le llegaban tenían las matrículas atornilladas, porque las roban. Sí, tenemos fama de ladrones. 
Copia del certificado de registro y permiso de circulación
que debe guardarse en casa
   Una vez colocadas las matriculas alemanas, vuelves a la Zulassungsstelle a entregar las matrículas españolas, que ya se quedan ellos.La tramitación de la baja del coche en España nos dijeron que la tramitaban ellos al remitir la documentación de que el coche había sido rematriculado en otro país. Cuando ya has averiguado todo esto y tu coche está rematriculado, vas al seguro con todo el tocho de papeles que te han dado y ya firmas el seguro definitivo. Una cosa importante es que tanto de la revisión del coche como del registro te dan una copia que debes guardar en casa, nunca en el coche. 


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